¿Por qué nadie incluye refacciones en sus propuestas de mantenimiento para aire acondicionado?
Seguramente en alguna ocasión, al contratar servicios de mantenimiento como un esquema de póliza anual, habrán notado que el refaccionamiento siempre es considerado como un costo adicional que surge exclusivamente en casos que los equipos de aire acondicionado fallan.
Si bien es cierto que podemos encontrar propuestas con un precio muy accesible, también vale la pena considerar cuales son los costos adicionales que se generan por conceptos de refaccionamiento y partes dañadas.
Este tipo de situaciones incluyen fallas regulares como capacitores, contactores, motores de evaporador, turbinas, tarjetas de control remoto y el peor concepto de todos “Recargas de Refrigerante”.
El objetivo del mantenimiento preventivo, es como su nombre lo dice, prever el posible daño de los componentes con la finalidad de realizar las correcciones necesarias y evitar así gastos adicionales a las empresas que contratan este tipo de servicios.
¿Ya suena como algo común o que pasa con regularidad?
En nuestro caso, las pólizas de mantenimiento preventivo incluyen refacciones además de la ejecución de los servicios correctivos sin costo adicional.
Pero, ¿qué es lo que sucede en este esquema de servicio y por qué me conviene?
Al recaer todos los costos adicionales sobre nosotros, adquirimos la obligación de realizar mantenimientos con la calidad suficiente como para garantizar los trabajos realizados, así como corregir los problemas derivados del mantenimiento de los equipos.
Esto es lo que podemos llamar un “ganar-ganar”, mientras se desincentiva en su totalidad el suministro e instalación de refacciones, los equipos se mantienen en condiciones óptimas de operación, realizando un mantenimiento preventivo de calidad que incluye el lavado de serpentines con hidrolavadora para garantizar la limpieza de las unidades, se verifican los parámetros de operación de los equipos, se realiza la revisión, apriete y verificación de todos los elementos eléctricos y se lubrican las piezas de desgaste para así reducir la posibilidad de fallas en los sistemas de aire acondicionado.
¿Qué hemos encontrado en el tiempo como proveedores de servicio?
Malos diagnósticos, consideraciones de cambios de compresores cuando la solución es el remplazo de un capacitor o un contactor.
Malas prácticas en manejo de refrigerantes, al sugerir recargas cada determinado tiempo de operación o con cierta regularidad; en términos prácticos, el refrigerante no es un consumible, tan sólo pensemos en los refrigeradores de casa, cada cuando hay que realizar una recarga, en muchos casos podremos corroborar que algunos equipos pueden a llegar a tener más de 10 o 15 años operando sin mayor problema.
Cambios de equipos por obsolescencia, todas las piezas o partes de un equipo de aire acondicionado son remplazables, a excepción de las tapas plásticas y en algunos casos donde el daño sea en serpentines, aún pueden ser reparados.
Como dato de referencia, algunos de nuestros clientes, pasaron de entre 6 y 8 cambios de compresores al año por 1 compresor en 11 años de servicio.
El objetivo es generar confianza y mantener nuestra responsabilidad como proveedores de servicio, no el obtener ingresos de una manera poco ética basados en el desconocimiento de los usuarios.
¿Tiene alguna duda específica?, acérquese a nosotros, con gusto le podremos asesorar.
